Sostienen que los republicanos pierden terreno entre hispanos
RUI FERREIRA / El Nuevo Herald
Activistas demócratas dijeron este fin de semana que los republicanos están perdiendo terreno entre el electorado hispano porque le han vuelto la espalda a los latinos, han desplegado una política total contra la inmigración y ni el nombramiento del senador cubanoamericano Mel Martínez a la dirección republicana ha sido suficiente para frenar esa tendencia.
``No hay un solo candidato republicano, exceptuando McCain, que haya abogado por los inmigrantes en esta campaña política. ¡Ninguno! En las elecciones pasadas [las intercalares congresionales del 2006] no hubo un solo anuncio televisivo republicano en español", dijo a El Nuevo Herald, el director de la Nueva Red Demócrata (NDN, por sus siglas en inglés), Simon Rosemberg.
Este aparente abandono de una parte sustancial del electorado es tan rara en términos políticos, que al senador demócrata Bob Menéndez lo único que se le ocurre es que los republicanos no tienen nada que ofrecer.
``No se aproximan a los latinos porque tienen un producto muy malo que vender y cuando eso sucede no lo quieren vender", dijo Menéndez a El Nuevo Herald.
Ejemplo de ello son los términos en que se dio el reciente debate migratorio en el Capitolio. 'Es increíble como en pleno año 2007 escuchamos a senadores hablando en términos de `esa gente', y están refiriéndose a los inmigrantes latinos, como nosotros'', añadió el senador cubanoamericano.
Y no sólo eso, añadió Menéndez, ``tenemos problemas sustanciales que no han sido abordados. Problemas como el hecho de que más del 50 por ciento de los hispanos no tienen seguro médico, enfrentan dificultades en acceder a créditos para sus casas y negocios''.
El senador cree que todo esto tiene que ver también con la percepción que los republicanos tienen de los hispanos.
''Es una cuestión de valores. Mientras ellos no se percaten que nuestros valores principales son familia, fe y búsqueda de oportunidades, es muy difícil que nos entiendan'', enfatizó.
Pero para el congresista por Illinois, Luis Gutiérrez, todo se resume en un problema de liderazgo. Y los republicanos ya lo perdieron entre los latinos.
''Cuando hay que reclamar justicia en la frontera, hay que actuar, hay que hablar. Y los líderes son aquéllos que enfrentan a los prejuicios y las discriminaciones de frente. Ojalá viviéramos en un mundo en que no hubiera problemas con la inmigración, pero no es así. Cada vez más a menudo las balas están siendo disparadas contra nuestra comunidad y no creo que debamos dejar de hablar sobre inmigraciones, los inmigrantes y nuestros problemas, por temor a perder la mayoría [en el Congreso]'', añadió Gutiérrez.
El despliegue de políticos y luminarias demócratas se dio este fin de semana en el marco de un seminario de dos días organizado por el NDN en el Hotel Biltmore, de Coral Gables, paralelamente al debate televisivo entre los precandidatos demócratas organizado por la cadena Univisión.
La generalidad fue extremadamente crítica de los republicanos, a quienes acusan de haber deliberadamente abandonado a los electores latinos, amparándose en una serie de datos electorales, lecturas políticas y sondeos que muestran una inclinación del voto hispano hacia los demócratas.
En las elecciones del 2000, los republicanos lograron controlar la mayoría del voto hispano. Pero cuatro años después, esa tendencia se invirtió y ahora los demócratas la atribuyen a una serie de factores que incluyen la guerra en Irak, el fracaso de la reforma migratoria y el deterioro del nivel de vida en Estados Unidos.
Según Rosemberg, los republicanos trajeron al senador Martínez para dirigir el partido, después que los latinos les voltearon la espalda en las elecciones del 2004 y, más recientemente, en las intercalares para el Congreso del 2006, cuando los republicanos perdieron la mayoría en ambas cameras.
Pero no dio resultado. ''Todo lo que pudieran hacer fue nombra un inmigrante hispano, pero ni con Mel Martínez logran recuperar al publico hispano. Es cierto que, de alguna forma, Martínez intentó impulsar el debate de la reforma migratoria, pero sus esfuerzos se diluyeron. Es para preguntarse por qué los republicanos no han querido debatir por Univision frente a una audiencia latina'', añadió el director del NDN.
El distanciamiento del electorado hispano ha sido admitido incluso por los estrategas republicanos. Según el Washington Post, el ex asesor presidencial, Karl Rove, dijo el mes pasado tras abandonar la Casa Blanca que la situación con los latinos ``era lamentable''.
En EEUU hay 17 millones de personas que nacieron en el extranjero y 11 millones de origen foráneo, pero que nacieron aquí. Y 13 millones de ese total son electores registrados.
Pero la problemática de los hispanos no es sólo inmigración. Como señalo Arturo Vargas, el director ejecutivo de la Asociación Hispana de Funcionarios Electos (NALEO), el interés de los hispanos va mas allá que inmigración. ``Existe un mito de que a los electores latinos sólo les interesa los temas de inmigración. Eso es muy simplista. Ellos se interesan por Irak, por los temas de salud, educación, y su voto es mucho más que eso. Su mensaje es muy claro, ellos quieren ser parte del futuro de este país", sostuvo Vargas.
Activistas demócratas dijeron este fin de semana que los republicanos están perdiendo terreno entre el electorado hispano porque le han vuelto la espalda a los latinos, han desplegado una política total contra la inmigración y ni el nombramiento del senador cubanoamericano Mel Martínez a la dirección republicana ha sido suficiente para frenar esa tendencia.
``No hay un solo candidato republicano, exceptuando McCain, que haya abogado por los inmigrantes en esta campaña política. ¡Ninguno! En las elecciones pasadas [las intercalares congresionales del 2006] no hubo un solo anuncio televisivo republicano en español", dijo a El Nuevo Herald, el director de la Nueva Red Demócrata (NDN, por sus siglas en inglés), Simon Rosemberg.
Este aparente abandono de una parte sustancial del electorado es tan rara en términos políticos, que al senador demócrata Bob Menéndez lo único que se le ocurre es que los republicanos no tienen nada que ofrecer.
``No se aproximan a los latinos porque tienen un producto muy malo que vender y cuando eso sucede no lo quieren vender", dijo Menéndez a El Nuevo Herald.
Ejemplo de ello son los términos en que se dio el reciente debate migratorio en el Capitolio. 'Es increíble como en pleno año 2007 escuchamos a senadores hablando en términos de `esa gente', y están refiriéndose a los inmigrantes latinos, como nosotros'', añadió el senador cubanoamericano.
Y no sólo eso, añadió Menéndez, ``tenemos problemas sustanciales que no han sido abordados. Problemas como el hecho de que más del 50 por ciento de los hispanos no tienen seguro médico, enfrentan dificultades en acceder a créditos para sus casas y negocios''.
El senador cree que todo esto tiene que ver también con la percepción que los republicanos tienen de los hispanos.
''Es una cuestión de valores. Mientras ellos no se percaten que nuestros valores principales son familia, fe y búsqueda de oportunidades, es muy difícil que nos entiendan'', enfatizó.
Pero para el congresista por Illinois, Luis Gutiérrez, todo se resume en un problema de liderazgo. Y los republicanos ya lo perdieron entre los latinos.
''Cuando hay que reclamar justicia en la frontera, hay que actuar, hay que hablar. Y los líderes son aquéllos que enfrentan a los prejuicios y las discriminaciones de frente. Ojalá viviéramos en un mundo en que no hubiera problemas con la inmigración, pero no es así. Cada vez más a menudo las balas están siendo disparadas contra nuestra comunidad y no creo que debamos dejar de hablar sobre inmigraciones, los inmigrantes y nuestros problemas, por temor a perder la mayoría [en el Congreso]'', añadió Gutiérrez.
El despliegue de políticos y luminarias demócratas se dio este fin de semana en el marco de un seminario de dos días organizado por el NDN en el Hotel Biltmore, de Coral Gables, paralelamente al debate televisivo entre los precandidatos demócratas organizado por la cadena Univisión.
La generalidad fue extremadamente crítica de los republicanos, a quienes acusan de haber deliberadamente abandonado a los electores latinos, amparándose en una serie de datos electorales, lecturas políticas y sondeos que muestran una inclinación del voto hispano hacia los demócratas.
En las elecciones del 2000, los republicanos lograron controlar la mayoría del voto hispano. Pero cuatro años después, esa tendencia se invirtió y ahora los demócratas la atribuyen a una serie de factores que incluyen la guerra en Irak, el fracaso de la reforma migratoria y el deterioro del nivel de vida en Estados Unidos.
Según Rosemberg, los republicanos trajeron al senador Martínez para dirigir el partido, después que los latinos les voltearon la espalda en las elecciones del 2004 y, más recientemente, en las intercalares para el Congreso del 2006, cuando los republicanos perdieron la mayoría en ambas cameras.
Pero no dio resultado. ''Todo lo que pudieran hacer fue nombra un inmigrante hispano, pero ni con Mel Martínez logran recuperar al publico hispano. Es cierto que, de alguna forma, Martínez intentó impulsar el debate de la reforma migratoria, pero sus esfuerzos se diluyeron. Es para preguntarse por qué los republicanos no han querido debatir por Univision frente a una audiencia latina'', añadió el director del NDN.
El distanciamiento del electorado hispano ha sido admitido incluso por los estrategas republicanos. Según el Washington Post, el ex asesor presidencial, Karl Rove, dijo el mes pasado tras abandonar la Casa Blanca que la situación con los latinos ``era lamentable''.
En EEUU hay 17 millones de personas que nacieron en el extranjero y 11 millones de origen foráneo, pero que nacieron aquí. Y 13 millones de ese total son electores registrados.
Pero la problemática de los hispanos no es sólo inmigración. Como señalo Arturo Vargas, el director ejecutivo de la Asociación Hispana de Funcionarios Electos (NALEO), el interés de los hispanos va mas allá que inmigración. ``Existe un mito de que a los electores latinos sólo les interesa los temas de inmigración. Eso es muy simplista. Ellos se interesan por Irak, por los temas de salud, educación, y su voto es mucho más que eso. Su mensaje es muy claro, ellos quieren ser parte del futuro de este país", sostuvo Vargas.