Pactan corte récord del impuesto a la propiedad
RUI FERREIRA / El Nuevo Herald
La Legislatura de la Florida anunció ayer el mayor recorte en los impuestos a la propiedad de toda la historia del estado. Tras dos intentos fracasados de senadores y representantes por llegar a un acuerdo, así como la programación de una sesión especial que comenzará el próximo martes, los líderes de la mayoría en ambas cámaras acordaron reducir ese gravamen en $31,600 millones en los próximos cinco años.
Esto implica una rebaja promedio de $1,300 por casa, o sea, el 44 por ciento. Los recortes afectarán a todo tipo de propietarios, sean residenciales o comerciales, sea su residencia primaria o no, pero no afectarán los distritos escolares.
Sin embargo, el proyecto todavía tiene que ser aprobado en las dos cámaras, y se prevé una fuerte resistencia por parte de algunos legisladores y gobiernos locales.
El recorte está dividido en dos partes, anunciaron en un comunicado conjunto el líder de la mayoría en la Cámara, Marco Rubio, y el del senado, Ken Pruitt.
Por un lado, con entrada en vigor en el año fiscal 2007-2008 que comienza el 1 de octubre, las ciudades y los condados deberán reducir los impuestos y llevarlos al nivel del 2006-2007. Por otro lado, deberán hacer otro recorte entre el 3, el 5, el 7 o el 9 por ciento, basándose en una fórmula que tiene en cuenta el nivel de recaudación de impuestos de los últimos cinco años. En Miami-Dade, el recorte sería del 7 por ciento. Para que entre en vigor sólo hace falta la aprobación de la Legislatura, y representa una reducción de $15,600 millones.
La segunda parte del recorte implica un incremento en la exención a las propiedades primarias, o sea, la residencia donde vive la persona, y se calcula que el promedio de ahorro por contribuyente sería de unos $1,300 en toda la Florida, a partir del año fiscal 2008-2009.
En este caso, los propietarios recibirán una exención del 75 por ciento en los primeros $200,000 del valor de la casa --la exención actual es de $50,000-- y un 15 por ciento de exención en los $300,000 siguientes. O sea, el primer medio millón queda reducido por las exenciones, pero no así los valores superiores que serán tasados a su valor normal previsto por la ley. Esta última parte, además de la aprobación de la legislatura, necesita la de los electores, mediante un referendo que está marcado tentativamente para el 29 de enero del 2008 y representa una reducción de $16,000 millones.
Pero uno de los artífices de este proyecto, el líder de la Cámara de Representantes, todavía no canta victoria.
''Todavía quedan varios capítulos en esta historia. Todavía tenemos que votar en la Legislatura, y va a haber mucha gente en contra. Esto es sólo un acuerdo entre los liderazgos, y va aparecer mucha gente cabildeando en contra, abiertamente y no; los gobiernos locales van a poner mucha resistencia'', dijo Rubio a El Nuevo Herald.
Por ello, ``le estoy diciendo al pueblo que siga llamando a sus representantes, que sigan presionando a los gobiernos locales, a los condados, porque todavía tenemos una batalla seria por delante''.
Para el representante republicano, que empeñó gran parte de su capital político en este proyecto, el recorte ``es una consecuencia del hecho de que el pueblo se ha hecho escuchar, del desborde de la gente en las reuniones públicas, pero no hemos terminado, y las manifestaciones deben seguir''.
A consecuencia del recorte en los impuestos a la propiedad, en términos prácticos el Condado de Miami-Dade verá bajar sus ingresos en los próximos cinco años en un 26.5 por ciento y la Ciudad de Miami en 25.6 por ciento. A esto se añade una reducción de 22 por ciento en los ingresos recolectados en las áreas no incorporadas.
Ayer, tras el anuncio del recorte en Tallahassee, las reacciones en el sur de la Florida no se hicieron esperar. No fueron unánimes.
El alcalde de Miami, Manny Díaz, se mostró satisfecho, y dijo que su equipo de finanzas trabajará este fin de semana para analizar las cifras y el impacto que la medida tendrá en la ciudad. ''En términos preliminares, es algo que está dentro de los parámetros que habíamos estudiado y que formaba parte de la propuesta que hicimos hace meses y por la cual habíamos cabildeado'', señaló el alcalde.
Pero para el comisionado del condado Carlos Giménez, la reforma del sistema de exención de impuestos a las casas primarias es cuestionable.
''Como está planteado ahora, la gente va a terminar pagando más, porque es un porcentaje del valor de la propiedad, no una cifra fija. Por lo demás no tengo problemas, tuvimos enormes ingresos en los últimos años y el gobierno [condal] debe controlar su crecimiento'', dijo Giménez. Pero ''tengo un problema con las nuevas exenciones, porque mucha gente va a tener que mudarse por eso. Mucha gente va a descubrir que no puede pagar [el impuesto]'', añadió.
Sin embargo, la comisionada Rebeca Sosa vio el anuncio como ''buena noticia'', y ''un buen compromiso'' aunque ''no sea el plan final''. ''El pueblo está pidiendo rebaja en los impuestos y esto responde a sus necesidades. El plan no exige recortes draconianos a los gobierno, pero los pone a dieta. Hay mucha tela por donde se puede rebajar los gastos sin afectar los servicios'', dijo la comisionada.
Una opinión similar es la del comisionado Joe Martínez.
''Es muy temprano para saber el impacto que va a tener esto en el Condado, pero siempre y cuando la reducción sea sustancial, el Condado va a sobrevivir y mantendremos los servicios básicos'', opinó Martínez.
A su vez, el comisionado José ''Pepe'' Díaz tiene una duda: ``Aquí hay que bajar los impuestos lo más posible para ayudar a las personas, pero quiero saber, ¿cuál es la ayuda del estado para ayudar a los gobiernos locales y no afectar los servicios del pueblo?''.
''¿Cuánto nos van a donar por esos recortes?'', insistió.
Este recorte, considerado el mayor en la historia del estado es, aun así, un poco menor que el compromiso que el gobernador Charlie Crist había propuesto después que la Cámara y el Senado no llegaron a un acuerdo en la sesión que terminó el 14 de mayo.
Pero es lo que Rubio tenia en mente, desde el principio.
''Siempre apuntamos hacia esto, una reducción sustancial de $1,300, o sea un 44 por ciento, y lo logramos'', dijo en una conversación telefónica con El Nuevo Herald.
La Cámara quería un recorte de $50,000 millones en los próximos cinco años, a lo que el Senado contrapuso una oferta de $20,000 millones. Transaron por los $31,600 anunciados.
El martes comienza la sesión especial de la Legislatura para discutir la propuesta, pero el lunes se reunirá el comité conjunto de impuestos a la propiedad para revisar el acuerdo.
Los reporteros Ketty Rodríguez y Daniel Shoer contribuyeron a esta información.
La Legislatura de la Florida anunció ayer el mayor recorte en los impuestos a la propiedad de toda la historia del estado. Tras dos intentos fracasados de senadores y representantes por llegar a un acuerdo, así como la programación de una sesión especial que comenzará el próximo martes, los líderes de la mayoría en ambas cámaras acordaron reducir ese gravamen en $31,600 millones en los próximos cinco años.
Esto implica una rebaja promedio de $1,300 por casa, o sea, el 44 por ciento. Los recortes afectarán a todo tipo de propietarios, sean residenciales o comerciales, sea su residencia primaria o no, pero no afectarán los distritos escolares.
Sin embargo, el proyecto todavía tiene que ser aprobado en las dos cámaras, y se prevé una fuerte resistencia por parte de algunos legisladores y gobiernos locales.
El recorte está dividido en dos partes, anunciaron en un comunicado conjunto el líder de la mayoría en la Cámara, Marco Rubio, y el del senado, Ken Pruitt.
Por un lado, con entrada en vigor en el año fiscal 2007-2008 que comienza el 1 de octubre, las ciudades y los condados deberán reducir los impuestos y llevarlos al nivel del 2006-2007. Por otro lado, deberán hacer otro recorte entre el 3, el 5, el 7 o el 9 por ciento, basándose en una fórmula que tiene en cuenta el nivel de recaudación de impuestos de los últimos cinco años. En Miami-Dade, el recorte sería del 7 por ciento. Para que entre en vigor sólo hace falta la aprobación de la Legislatura, y representa una reducción de $15,600 millones.
La segunda parte del recorte implica un incremento en la exención a las propiedades primarias, o sea, la residencia donde vive la persona, y se calcula que el promedio de ahorro por contribuyente sería de unos $1,300 en toda la Florida, a partir del año fiscal 2008-2009.
En este caso, los propietarios recibirán una exención del 75 por ciento en los primeros $200,000 del valor de la casa --la exención actual es de $50,000-- y un 15 por ciento de exención en los $300,000 siguientes. O sea, el primer medio millón queda reducido por las exenciones, pero no así los valores superiores que serán tasados a su valor normal previsto por la ley. Esta última parte, además de la aprobación de la legislatura, necesita la de los electores, mediante un referendo que está marcado tentativamente para el 29 de enero del 2008 y representa una reducción de $16,000 millones.
Pero uno de los artífices de este proyecto, el líder de la Cámara de Representantes, todavía no canta victoria.
''Todavía quedan varios capítulos en esta historia. Todavía tenemos que votar en la Legislatura, y va a haber mucha gente en contra. Esto es sólo un acuerdo entre los liderazgos, y va aparecer mucha gente cabildeando en contra, abiertamente y no; los gobiernos locales van a poner mucha resistencia'', dijo Rubio a El Nuevo Herald.
Por ello, ``le estoy diciendo al pueblo que siga llamando a sus representantes, que sigan presionando a los gobiernos locales, a los condados, porque todavía tenemos una batalla seria por delante''.
Para el representante republicano, que empeñó gran parte de su capital político en este proyecto, el recorte ``es una consecuencia del hecho de que el pueblo se ha hecho escuchar, del desborde de la gente en las reuniones públicas, pero no hemos terminado, y las manifestaciones deben seguir''.
A consecuencia del recorte en los impuestos a la propiedad, en términos prácticos el Condado de Miami-Dade verá bajar sus ingresos en los próximos cinco años en un 26.5 por ciento y la Ciudad de Miami en 25.6 por ciento. A esto se añade una reducción de 22 por ciento en los ingresos recolectados en las áreas no incorporadas.
Ayer, tras el anuncio del recorte en Tallahassee, las reacciones en el sur de la Florida no se hicieron esperar. No fueron unánimes.
El alcalde de Miami, Manny Díaz, se mostró satisfecho, y dijo que su equipo de finanzas trabajará este fin de semana para analizar las cifras y el impacto que la medida tendrá en la ciudad. ''En términos preliminares, es algo que está dentro de los parámetros que habíamos estudiado y que formaba parte de la propuesta que hicimos hace meses y por la cual habíamos cabildeado'', señaló el alcalde.
Pero para el comisionado del condado Carlos Giménez, la reforma del sistema de exención de impuestos a las casas primarias es cuestionable.
''Como está planteado ahora, la gente va a terminar pagando más, porque es un porcentaje del valor de la propiedad, no una cifra fija. Por lo demás no tengo problemas, tuvimos enormes ingresos en los últimos años y el gobierno [condal] debe controlar su crecimiento'', dijo Giménez. Pero ''tengo un problema con las nuevas exenciones, porque mucha gente va a tener que mudarse por eso. Mucha gente va a descubrir que no puede pagar [el impuesto]'', añadió.
Sin embargo, la comisionada Rebeca Sosa vio el anuncio como ''buena noticia'', y ''un buen compromiso'' aunque ''no sea el plan final''. ''El pueblo está pidiendo rebaja en los impuestos y esto responde a sus necesidades. El plan no exige recortes draconianos a los gobierno, pero los pone a dieta. Hay mucha tela por donde se puede rebajar los gastos sin afectar los servicios'', dijo la comisionada.
Una opinión similar es la del comisionado Joe Martínez.
''Es muy temprano para saber el impacto que va a tener esto en el Condado, pero siempre y cuando la reducción sea sustancial, el Condado va a sobrevivir y mantendremos los servicios básicos'', opinó Martínez.
A su vez, el comisionado José ''Pepe'' Díaz tiene una duda: ``Aquí hay que bajar los impuestos lo más posible para ayudar a las personas, pero quiero saber, ¿cuál es la ayuda del estado para ayudar a los gobiernos locales y no afectar los servicios del pueblo?''.
''¿Cuánto nos van a donar por esos recortes?'', insistió.
Este recorte, considerado el mayor en la historia del estado es, aun así, un poco menor que el compromiso que el gobernador Charlie Crist había propuesto después que la Cámara y el Senado no llegaron a un acuerdo en la sesión que terminó el 14 de mayo.
Pero es lo que Rubio tenia en mente, desde el principio.
''Siempre apuntamos hacia esto, una reducción sustancial de $1,300, o sea un 44 por ciento, y lo logramos'', dijo en una conversación telefónica con El Nuevo Herald.
La Cámara quería un recorte de $50,000 millones en los próximos cinco años, a lo que el Senado contrapuso una oferta de $20,000 millones. Transaron por los $31,600 anunciados.
El martes comienza la sesión especial de la Legislatura para discutir la propuesta, pero el lunes se reunirá el comité conjunto de impuestos a la propiedad para revisar el acuerdo.
Los reporteros Ketty Rodríguez y Daniel Shoer contribuyeron a esta información.